Promete Mario Riestra a la CMIC licitar obras públicas con empresas poblanas
- El candidato de Mejor Rumbo para Puebla a la alcaldía, se comprometió con la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, a licitar los contratos de obras públicas que se realicen en su gestión con empresas poblanas
Toda vez que logre ser electo el próximo 2 de junio, el candidato de Mejor Rumbo para Puebla a la alcaldía, Mario Riestra Piña, se comprometió con la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), a licitar los contratos de obras públicas que se realicen en su gestión con empresas poblanas.
Durante su participación en Diálogos con el Sector de la Construcción, organizado por el organismo empresarial, el legislador con licencia explicó que su plan es que las edificaciones que se realicen en la capital sean por manos poblanas, y que a su vez, traiga beneficios al este sector.
“Mi compromiso es trabajar en estrecha colaboración para el beneficio de los poblanos”, señaló.
También destacó que las corporaciones cuentan con la capacidad necesaria para realizar un buen trabajo, además de contar con la experiencia para desarrollar cualquier tipo de obra, por lo que anunció la colaboración junto con el Ayuntamiento de Puebla.
Mario Riestra Piña aseguró que es el único candidato en firmar el Pacto por la Primera Infancia, pues explicó que al iniciar con su campaña política, se realizó un acuerdo con los comerciantes de la Central de Abastos, en donde echará a andar un módulo de alfabetización, debido a han detectado un grupo de menores que laboran en este lugar.
Insistió que en conjunto con el candidato a la gubernatura, Eduardo Rivera Pérez, prometieron ampliar el número de edificaciones que fueron parte del programa de estancias infantiles, que dijo haber sido un éxito con las primeras 70 que operaron en la capital.
También señaló que recuperarán las escuelas de tiempo completo para los menores de edad, misma que con antelación había explicado que tendrá la función de que las cabezas de familia puedan salir a trabajar sin temor a que sus hijos se queden desprotegidos.