El empresario periodístico y su romance con Vielka
Rumor sin Fronteras / Por Gerardo Pérez García
El fatal desenlace que acabó con la vida de la influencer Vielka Pulido el pasado miércoles por la mañana, a manos de sicarios, quienes la ejecutaron con 10 disparos, al igual que a su pareja Jesús Abraham Chávez, en la zona comercial de Zavaleta, muestra una vez más la estela de muerte y destrucción a manos de bandas criminales que se han enseñoreado de Puebla.
Hace 10 días ejecutaron a Jaime González, candidato de Morena a la Presidencia Municipal de Acatzingo en su negocio de compra-venta de automóviles en presencia de su esposa y dos menores hijos.
Y el pasado 25 de marzo acribillaron al policía estatal Adán Montes Rosales en Periplaza.
Además de la irrupción del grupo delictivo “Operación Barredora”, que a través de un video emplaza al gobernador Sergio Salomón Céspedes para que los jefes policiacos dejen de estar cooperando con ratas y grupos independientes, de no hacerlo van a quedar como Adán Montes.
-Advertencia que también hicieron al Ejecutivo del Estado de Chiapas, Rutilio Escandón–
Esta es la “Puebla de paz y tranquilidad” que presume el mandatario Céspedes Peregrina.
Lo anterior viene a colación porque resulta que un empresario periodístico sostuvo tórrido romance con Vielka.
A verla en un antro, se impactó de su belleza.
La cortejó en innumerables ocasiones.
Eran comidas y cenas.
Las flores no podían faltar.
Siguieron los viajes con Vielka y un grupo de amigas.
-Acapulco y al Caribe-
Después los arreglos estéticos de ella.
El obsequio de un Mustang.
El empresario la presumía en restaurantes.
Y, obviamente, con amigos y familiares.
No cesaba de presentarla como su novia.
Y futura esposa.
Vielka se hacía acompañar de su tía.
-¿O era su mamá?-
Transcurrían los meses y el romance seguía “viento en popa”.
Decía que era “su rusa”.
De un día para otro… todo acabó.
El “amor” terminó.
Se esfumó.
Salió por el ventanal.
¿Qué pasó?
¿Estaban por unir sus vidas?
Solo él y ella lo saben.
Pero antes de partir al más allá, Vielka conoció a Jesús Abraham –oriundo de Chihuahua- y se fue a vivir con él a Lomas de Angelópolis.
Y el empresario periodístico decidió casarse.
Vaya historia amorosa.
Y vaya final.
Ella pasó al eterno descanso.
Él se queda con los recuerdos.
Mientras tanto, la vida continua en la Puebla levítica inmersa en el proceso electoral del domingo 2 de junio.
Amén, que al corte de hoy la batalla por el control de Puebla la van perdiendo
los Ángeles ante los demonios.
Por cierto, el primero de abril en su cuenta de Threads, Vielka escribió:
… “Los Ángeles me cuidan, me tiran y no le atinan”.
Dos días después recibió 10 disparos.
Y su vida terminó.
Los Ángeles ya no la cuidaron.
¿Qué sigue?
Al tiempo.