Rumor sin Fronteras / Por Gerardo Pérez García
Así como Eduardo Rivera Pérez aprovechó su trabajo en la Presidencia Municipal, durante los primeros dos años de su trienio, para posicionarse en la ciudad y zona metropolitana, y a la par obtener la pre-candidatura del PAN al gobierno, desplazando a panista de viejo cuño.
Así como Mario Riestra Piña, desde la Cámara de Diputados tendió redes para lograr virtual abanderamiento a la alcaldía capitalina, –“joya de la corona” albiazul, de manera contundente.
Así como Edmundo Tlatehui Percino, con trabajo humano y de beneficio a la población de San Andrés Cholula, ha logrado tal posicionamiento y calificación que le permite -de acuerdo a determinación de género del CDE- ir por la reelección o que su esposa Lupita Cuautle sea la candidata.
Hechos y acciones que llevan a esta triada azul a tener potencial de voto para los comicios del próximo domingo 2 de junio.
Además, los tres son brother-brother.
Lalo-Mario-Mundo están inmersos –política y electoralmente- en el corazón del Estado de Puebla, como es la capital y zona conurbada, que aglutina más del 40 por ciento de la votación nominal.
Amén que históricamente el voto de las y los poblanos de esa demarcación es panista.
El que ganen o pierdan… será otra historia.
El hecho real es que los tres albiazules son competitivos y Morena lo tiene más que claro, y presente.
Tan es así, que Alejandro Armenta mandó a su operador de Medios, –Pepe– José Tomé para hacerse cargo de la Dirección de Comunicación Social del Comité Estatal de Morena.
Y el pasado miércoles designó al Senador José Ramón Enríquez en la Coordinación de Puebla Capital y 20 municipios conurbados.
Con el agregado:
Al interior de Morena hay feroz batalla por nominación al Palacio de Charlie Hall, pues los duros y puros morenistas rechazan la imposición de José Chedraui que pretende hacer el mandatario Sergio Salomón Céspedes.
De cristalizar la unción de Pepe Chedraui… sería un “Regalo de Reyes” para Mario Riestra, puesto que los aspirantes “rebeldes” –Claudia Rivera, Alejandro Carbajal, entre otros- y afines al instituto guinda cobrarían la factura el “Día D”.
Un ejemplo claro y contundente es Claudia Rivera Vivanco que se empecinó en reelegirse en 2021… Y perdió.
Aunado al serial de desencuentros de doña Claudia con el entonces mandatario Miguel Barbosa Huerta, que derivó en derrota ante Eduardo Rivera Pérez.
Sin olvidar:
Lalo Rivera, Mario Riestra y Mundo Tlatehui no cargan –para bien o para mal- a un gobernador de su partido, con sus respectivas imposiciones y lineamientos, lo que les da a los azules libertad de trabajo y conformación de equipos.
TALÓN DE AQUILES… EL PRI
Pero…
Lalo Rivera y Mario Riestra carecen de un jefe de prensa.
Sus actividades proselitistas no han tenido la debida fuerza mediática por tener a gente que no conoce a los reporteros, mucho menos a los medios.
Y poner la “Iglesia en manos de Lutero” es correr demasiado riesgo.
La inercia informativa se ha dado por el capital político de ambos, no por sus respectivos jefes de “prensa”.
No se incluye a Mundo Tlatheui, pues aún continúa de edil de San Andrés de Cholula y ahí tiene a un eficiente y eficaz comunicador –Carlos Flores Lama– que ha sumado a tiros y troyanos en torno de su jefe.
Lo que sí cargan –y cargarán- los tres es el desprestigio de los dirigentes del Partido Revolucionario Institucional, que en los hechos está por quedar sin diputados en el Congreso del Estado ante la migración de unos a Morena y otros que van por diputaciones, alcaldías y senaduría.
Lo que convierte al PRI en un cadáver, que ante un ventarrón caerá y ya no se levantará.
Diría el clásico morenovallista… “lo mejor está por venir”.
Al tiempo.